El SEPRONA de Fuerteventura el pasado mes de marzo, fruto de la colaboración ciudadana perteneciente a una organización que lucha en contra del maltrato animal, informó el mal estado en el que se hallaban unos perros en una localidad del término municipal de Antigua (Fuerteventura).
Tras discernir las coordenadas exactas de los animales mediante un meticuloso análisis, los agentes, en conjunción con el veterinario municipal, se trasladaron con premura al lugar donde se hallaban los animales.
Ante la sobrecogedora imagen que exhibían los canes, se activó de inmediato los protocolos de rescate y albergue de la Mancomunidad Centro-Sur de Fuerteventura
Tres ejemplares de podenco canario, fueron hallados en un recinto que dista radicalmente de los estándares mínimos de bienestar animal.
Las instalaciones presentaban estructuras improvisadas con mallas metálicas oxidadas, palets desintegrados y tableros de obra con aristas cortantes, carentes de cualquier protección frente a lluvias, vientos o temperaturas extrema.
Los animales se encontraban con una alta carga parasitaria, dos de ellos desnutridos, presentando una delgadez severa, con mutilaciones en orejas, blefaritis infecciosa, dermatitis húmeda, dermatitis alérgica por picadura de pulgas, cadenas mamarias con presencia de quistes entre otros.
Los animales fueron trasladados a la Mancomunidad Centro – Sur de Fuerteventura, estando a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción en funciones de Guardia de Puerto del Rosario.
Los agentes una vez que obtuvieron el dictamen veterinario, el pasado día 07 de abril de 2025, procedieron a investigar a un varón residente en la isla como presunto autor de un delito incluidos en el Titulo XVI bis, Sobre Delitos contra los Animales de la Ley Orgánica 10/1995 de 23 de noviembre del Código Penal.
