La asociación JUSAPOL, junto al sindicato de la Policía Nacional JUPOL y la Asociación Profesional de la Guardia Civil JUCIL, ambos mayoritarios en los respectivos Consejos de la Policía Nacional y de la Guardia Civil convocan a los ciudadanos a unirse el próximo sábado, 4 de marzo a la manifestación organizada en Madrid en contra de la reforma prevista por el Gobierno de España y sus socios independentistas de la Ley de Seguridad Ciudadana.
Los promotores de esta manifestación han mostrado su profundo malestar por “una reforma que se está llevando a cabo sin tener en cuenta la opinión de los profesionales de la seguridad ciudadana, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y los juristas” y añaden que esta reforma “hará de España un país más inseguro, tanto en las áreas urbanas como en las rurales”.
Desde JUSAPOL se ha aseverado que con esta reforma “los policías y guardias civiles tendrán más difícil, y en ocasiones casi imposible, llevar a cabo su labor, y quienes sufrirán las consecuencias serán los ciudadanos, que se verán perjudicados ya que la voluntad de unos pocos será suficiente para recortar sus derechos y libertades”.
Ante esta situación, desde JUSAPOL, como ya se hiciera al inicio de la reforma legislativa en el año 2021, ha decidido salir a la calle en protesta por una reforma que “solo beneficia a los manifestantes violentos y a los delincuentes y ata de pies y manos a los agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad”. Una movilización que se hará el próximo sábado 4 de marzo en Madrid bajo el lema “¡Por una España más Segura!”.
Oposición a las enmiendas a la Ley de Seguridad Ciudadana
Los organizadores de esta manifestación invitan a todos los ciudadanos a unirse a esta expresión de disgusto y malestar que comenzará a las 12 del mediodía en la plaza de Neptuno de Madrid y en la que todos los asistentes serán bienvenidos para unirse en una marcha pacífica por las calles de la capital de España.
Ernesto Vilariño secretario general de JUCIL hace un llamamiento a todos los sindicatos, organizaciones profesionales y asociaciones de trabajadores que deseen participar junto a nosotros en esta manifestación, “a la vez que mostramos nuestro deseo a que nos acompañen tantos representantes políticos como lo deseen, a los que pedimos que eleven a la tribuna del parlamento y a otros espacios de decisión política, las mismas consignas que expresarán junto a nuestras pancartas”.
Desde JUSAPOL, su presidente Miguel Gómez ha indicado que “esta reforma no mejorará el bienestar social, tampoco generará confianza en la seguridad ciudadana y ataca directamente a nuestra convivencia cívica” y añade que la misma “pone en una gravísima situación a los policías y a los ciudadanos, desprotegiéndoles ante los ataques continuos de los violentos que harán de las calles un estado paralelo, sin límites, donde reinará el caos, la improvisación y el odio a quienes día a día se esfuerzan y sacrifican para crear un modelo ciudadano ejemplar y de referencia a las generaciones más jóvenes”.
Para el secretario general de JUPOL, Aarón Rivero, la modificación de la Ley de Seguridad Ciudadana “se produce en un contexto muy negativo para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, con efectivos desmoralizados y debilitados, en un escenario de violencia agravada y con una fragante perdida del principio de autoridad”. Una situación que ha añadido Rivero “deriva en un incremento de las agresiones a policías y a una peligrosa judicialización de la labor de los agentes con una falta total de respaldo por parte del Gobierno de España”.
Rivero ha criticado que el Ministerio del Interior esté impulsando esta reforma “mientras da la espalda a las reivindicaciones históricas de la Policía Nacional en materia salarial, la Equiparación con las policías autonómicas, las jubilaciones y las dietas; la jornada laboral o el Derecho a Huelga entre otras”.
El secretario general de JUPOL asegura que “las modificaciones que se pretenden hacer en la Ley de Seguridad Ciudadana perjudicarán directamente la eficacia policial, con la consiguiente desprotección de la sociedad. Y añade que las reformas propuestas “van en dirección contraria a las necesidades de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad para afrontar con garantías los nuevos desafíos a los que nos enfrentamos: delincuencia de alta intensidad, bandas juveniles violentas, mafias internacionales o delincuencia tecnológica”.