La Guardia Civil ha investigado a dos mujeres de cuarenta y seis y veinte años de edad respectivamente, madre e hija, como presuntas autoras de haber estafado 800 euros a un anciano de ochenta y tres años de edad vecino de la localidad de Armilla.
Una de las mujeres llamó a la puerta de la casa del anciano y le dijo que ella era cuidadora y que sabía que este se encontraba desatendido y que necesitaba ayuda. El anciano no solo le franqueó la entrada a la mujer, sino que incluso le dio su tarjeta bancaria para que fuera a realizar compras y para que sacara 20 euros del cajero como pago por sus servicios.
La mujer no sacó los 20 euros que le dijo el anciano. La Guardia Civil ha averiguado que esta mujer y su hija hicieron un duplicado de la tarjeta bancaria y extrajeron 100 euros el primer día, otros 100 euros el segundo y 600 euros el tercero en dos entidades bancarias diferentes de la localidad de Armilla.
La hija del anciano descubrió que habían sacado 800 euros de forma fraudulenta de la cuenta de su padre y denunció en el acuartelamiento de la Guardia Civil de Armilla.
Los agentes del Área de Investigación del puesto de Armilla primero se entrevistaron con el anciano, y más tarde con los vecinos de este para tratar de averiguar la identidad de las dos mujeres. Con la información obtenida consiguieron identificarlas y más tarde, tras acceder a las imágenes de seguridad de los dos cajeros donde extrajeron el dinero corroboraron que las presuntas autoras de dichas extracciones fraudulentas eran la madre y la hija ahora investigadas.
