Redacción
Esta nueva tecnología funciona a través de unas cámaras que captan y fotografían todos los vehículos a pie de carretera indiscriminadamente y, con un procedimiento de filtrado automatizado , sólo envía al sistema informático aquellos archivos en los que detecta que existe una probabilidad elevada de que haya una persona utilizando el móvil mientras conduce.
Varios parámetros, como la posición del conductor en el vehículo, hacen posible que el sistema haga un cribado automático de las imágenes realizadas.
En última instancia estas fotografías seleccionadas siempre son revisadas por un técnico del SCT para verificar que se está cometiendo esta infracción. de las cuales en 10.000 el sistema ha detectado con un 80% de seguridad que existe una infracción o bien por hablar con el móvil o por no llevar el cinturón. De éstas, ya se han revisado 5.000 y por el momento se han enviado más de 100 multas.