La Sección 3 de la Audiencia Provincial de Murcia condena a un hombre de nacionalidad italiana a tres años y medio de prisión, como autor de un delito contra la salud pública por tráfico de drogas y otro por comercializar en el extranjero con productos adulterados para aumentar el rendimiento sexual en los hombres.
El acusado, “con conocimiento de la ilicitud de su conducta”, explica la sentencia dictada in voce tras el reconocimiento de hechos, publicitaba medicamentos, adulterados con sustancias que no se indicaban en sus etiquetas, como productos con un supuesto origen natural, ocultando al consumidor su verdadera composición, y exponiéndolo a “riesgos no justificables desde un punto de vista sanitario”.
La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, tras analizar las pastillas, cápsulas y espray, determinó que contenían como adulterantes la sustancia activa “vardenafilo” y “tiosidenafilo”. Por lo que, según los hechos probados, se trata de complementos alimenticios que suponen “un riesgo para la salud pública por contener sustancias con actividad farmacológica no declarada”.
Y cuya comercialización no se permite en España, añadía el informe técnico emitido, ya que los productos analizados, por sus características farmaconitecnicas y el desconocimiento de su perfil de seguridad, “pueden producir graves daños a la salud”.
En los registros efectuados por la Guardia Civil en su domicilio de Las Torres de Cotillas (Murcia), además de las 1.725 pastillas y cápsulas y 239 espráis elaboradas en un laboratorio chino intervenidas, se hallaron utensilios y efectos propios de un laboratorio químico, lo que permitió descubrir que el acusado se venía dedicando a la elaboración de cannabis sintético.
El acusado, según el fallo de la sentencia, que ya es firme, deberá hacer frente a una multa de 1.900 euros, y se le impone la inhabilitación especial para el comercio de productos para aumentar el rendimiento sexual.