Mossos d’Esquadra
Agentes de la Policía de la Generalitat – Mossos d’Esquadra adscritos a la Unidad Central de Falsificación de Moneda de la División de Investigación Criminal (DIC) han detenido en Valencia a un hombre de 44 años al que se le atribuye un delito de estafa y otro de falsificación de efectos timbrados. Habría enviado 4.742 cartas dirigidas al extranjero desde 379 buzones de distintas poblaciones de la demarcación de Barcelona.
Los Mossos d’Esquadra han hecho difusión de la estafa a través de Europol para localizar a posibles víctimas en países de la Unión Europea.
La investigación se inició a mediados de abril de 2022 después de que el Centro de Tratamiento Automatizado de Correos detectara varias cartas con los sellos falsificados. Los sobres se habían depositados en los buzones de las poblaciones de Barcelona, Badalona, Sant Adrià del Besòs, Rubí, San Cugat del Vallés, Sabadell, Terrassa, Viladecans, San Boi de Llobregat, El Prat de Llobregat y Cornellà de Llobregat.
Agentes de la Unidad Central de Falsificación de Moneda de la DIC identificaron al emisor de las cartas, que actualmente residía en Valencia y le detuvieron el viernes 27 de abril con el apoyo de la Policía Nacional.
También llevaron a cabo una entrada y registro en su domicilio donde localizaron sellos falsificados y sobres idénticos a los entregados por los responsables de Correos y cartas de similares características a las que ya había enviado, para estafar a personas de otros países como Suiza, Suecia, Austria, Noruega, Bélgica, Holanda y Alemania.
La investigación la dirigió por el Juzgado de Instrucción número 1 de Rubí que decretó libertad con cargos para el detenido.
La estafa en la modalidad de las cartas nigerianas
Las cartas suplantaban la identidad de un trabajador de un despacho de abogados que tenía información privilegiada y que buscaba a familiares de un empresario fallecido en el 2012 en un accidente de tráfico. El supuesto empresario les había dejado como herederos de gran fortuna. Para hacer efectiva la herencia, emplazaba a las víctimas a pagar sus honorarios para iniciar la reclamación jurídica.
Extracto de una de las cartas enviadas:
“…Antes de su fallecimiento, depositó la suma de 11.8 millones de dólares en un banco aquí en España. Ahora el banco me ha encomendado buscar algún heredero de la familia para reclamar el dinero antes de que sea confiscado o revertido por la Oficina de Seguridad Diplomática, como fondo no reclamado. Por ello, he decidido buscar a algún familiar de mi difunto cliente, tarea que me ha resultado muy difícil porque no declaró ninguna otra persona, dirección, socio o familiares en la documentación oficial de su depósito.
En este contexto, mi propuesta es que usted, como extranjero, sea el pariente más cercano de mi difunto cliente ingeniero ya que tienen el mismo apellido. Como su abogado, le nombraré y reconoceré como su heredero. Con su ayuda prepararé todos los documentos pertinentes para su reclamación y facilitaré la emisión y la transferencia de los fondos a su cuenta. Una vez el dinero le haya sido transferido, viajaré hasta su país y lo dividiremos al 50% para cada uno.
Tenga en cuenta que esta transacción es 100% segura, y le garantizo que esta operación se realizará bajo la legalidad y sin que se infrinja la ley. Le pido también que no comprometa a ninguna tercera persona en esta transacción, solo usted y yo.Además, estoy haciendo esto a título personal sin involucrar a mi despacho…”