La Policía Nacional de la Jefatura Superior de La Rioja previene a los ancianos de una modalidad de robo conocida como el método del “amoroso”, hurto amoroso o abrazo amoroso, técnica que utilizan frecuentemente los delincuentes para aproximarse a las víctimas con el fin de ganarse su confianza.
Tratan de aproximarse a personas de edad avanzada hasta llegar a mantener un contacto físico, lo que les facilita en ese mismo instante la sustracción de las joyas y efectos de valor que portan.
El ‘modus operandi’ es siempre el mismo: el delincuente selecciona a su víctima entre el colectivo de personas mayores o de avanzada edad que se encuentran en la vía pública portando alguna pieza de joyería de valor, acercándose una mujer y con la excusa de darles un beso, le arrebatan las joyas que portan. En alguno de los casos incluso se inicia un forcejeo entre la víctima y la autora.
La Policía Nacional destaca que, en la mayoría de los casos, los ancianos no se percatan de que les han quitado algún objeto de valor, llegando a pensar algunas veces que se trataba de una pérdida y no de una sustracción.
Generalmente, este tipo de delitos son llevados a cabo por mujeres jóvenes que, una vez cometido el robo, abandonan el lugar a pie o a bordo de un vehículo conducido por una segunda persona. A cualquier hora del día, la delincuente se aproxima a una persona mayor, a pie o en vehículo, con diferentes pretextos (firmar en una campaña de apoyo a alguna causa social, preguntar por una dirección, confundirle falsamente con algún conocido e incluso para ofrecerle relaciones sexuales).
Como señal de agradecimiento, tocan o abrazan a su víctima sin que ésta se dé cuenta de que con el abrazo le está sustrayendo relojes, cadenas y otras joyas de valor, tanto económico como sentimental. Seguido, abandonan rápidamente el lugar, ya que a escasos metros les espera su “compinche” montado en un vehículo y asegurándose así la huida.